Poltgo David R. Dubén F.
Hay que ser bien osado para criticar la buena imagen de
una excelente gestión municipal, sin otro argumento, que el deseo de atacar por
atacar, ello solo es posible por dos razones: o no vive en el municipio o por
motivos políticos. Uno entiende que
en época electoral, quienes adversan al gobernante en turno recurran a las
denuncias sobre problemas existentes dentro de la comunidad. En otros casos,
los adversarios políticos prefieren utilizar la vía mas corta y se montan en
una campaña de desprestigio, negando y desconociendo todos los avances y logros
de dicha gestión municipal. El primero, es un ejemplo de las razones políticas; el segundo, de alguien que no hace
vida en el municipio que desea gobernar.
Este tipo de estrategia generalmente es válida cuando quien
gobierna no tiene muchos logros que mostrar pero cuando es lo contrario y
existen pruebas irrefutables de una gestión exitosa, se revierte en contra de
quien la utiliza. Por este mismo motivo el propio pueblo, con esa ocurrencia y
jocosidad que lo caracteriza, ha bautizado al candidato de Maduro en Mariño
como el “candidato turista”, quien
muy pocas veces por razones políticas, aunque si electorales, y casi siempre
por ignorancia, critica la gestión del actual Alcalde Alfredo Díaz. Cada uno de esos ataques simplemente demuestran
un total y absoluto desconocimiento de la realidad del municipio y de los
grandes logros alcanzados por el gobierno del Alcalde Alfredo Díaz, mas aun cuando omite con una clara
intención, el simple detallito de que la mayor parte de los problemas que
aquejan a la ciudadanía, no son responsabilidad exclusiva de esta gestión, sino que corresponden a más
de diez años de indolencia y desidia, tanto de las antiguas autoridades
municipales, como del gobierno nacional.
Otro aspecto sesgado se vincula con el grado de
responsabilidad asignado a las autoridades competentes para resolver los problemas
del municipio pues según el candidato
turista, Porlamar es poco menos que un territorio independiente donde no
tiene cabida la acción del gobierno regional y central. Aparte de una que otra
jornada de carácter electoral, digo social ¿Cuáles son las grandes obras de
este gobierno para el beneplácito de la colectividad porlamarense? NINGUNA.
Por el
contrario, es público y notorio el saboteo sistemático que le han tratado de
aplicar a este gobierno municipal. Empezando por la aprobación de un situado
constitucional deficiente, la falta de colaboración de los entes públicos
nacionales para la ejecución de obras, poca disposición para luchar contra la
impunidad y acabar con la anarquía, entre otras. Pero también están todas las
medidas y acciones judiciales para impedir la reordenación del casco central y
reubicar a los comerciantes informales, el despojo de las instalaciones del
Puerto de la Mar y el antiguo Comedor Popular, y pare de contar.
La desesperación es mala consejera, entendemos su preocupación
porque el Alcalde Alfredo Díaz goza
de un elevado nivel de aprobación de su gestión que ronda el 75%, y una
intención al voto cercana al 60%, lo cual es el reconocimiento a una eficiente
labor que no privilegia condición social, ni simpatías partidistas. Y no es con
descréditos, ni verdades a medias que un candidato
turista escogido a dedo, podrá derrumbar.
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